El Pombero

El Pombero es un duende antropomorfo, supuestamente de sexo masculino, feo, mas bien bajo, fornido, retacón, moreno, con manos y pies velludos, cuyas pisadas no se sienten.

De acuerdo a esto último su interpretación esta vinculada al famoso Pata ´e lana.

Lo describen mas bien andrajoso, cubierto con un sombrero de paja y con un bolso al hombro, por lo general completamente desnudo. Habita en el bosque, en casas o taperas. Anda de noche o en a la siesta.

Tiene habilidades tales como mimetizarse con facilidad, hacerse invisible cuando quiere y hacerse sentir por un toque con sus manos velludas que producen piri (escalofríos); puede deslizarse por los espacios mas estrechos, pasar por el ojo de una cerradura, correr en cuatro patas, imitar el canto de las aves, el silbido de los hombres, el grito de animales: aullidos, piar como los pollitos y demás variedades.

Por esto también se lo describe como ventrílocuo. Tiene ocurrencias y es travieso; suelta a los animales del corral o dispersa tropas o manadas de animales salvajes o domésticos.

Es sensual. Despierta a las mujeres con un suave roce o caricia generando pirí, especialmente a las que duermen afuera en las noches de verano o en sus ranchos a la hora de la siesta. Esto le permite a las mujeres temerosas de confesar sus amoríos que dejan frutos, adjudicarle al espíritu espermático del Pombero sus hijos.

Pues bien, de acuerdo a esto último se lo podría considerar como la versión litoraleña del Espíritu Santo. Posee a sus víctimas y se cuenta que las mujeres embarazas por él tienen hijos con los mismos poderes que el Pombero.

Este personaje también es muy cuidadoso con los niños, ya que tiene un espíritu muy tierno.

Un ejemplo concreto de su efecto lo cita una nota del diario La Nación del día 15 de Noviembre de 2002, donde se cuenta que un niño perdido por tres días en plena selva Misionera (cercano a la localidad El Dorado), fue encontrado sano y salvo gracias a los cuidados y protección del Pombero.

Su presencia en el litoral argentino es de acuerdo a esta descripción, pero existe una versión en el Noroeste de nuestro país, solo que se presenta vestido, de aspecto flaco y alto.

No tan frecuente en el sur de Brasil y Paraguay.